Ahora más que nunca la exposición on line es altamente recomendada y gracias a la tecnología, redes sociales, y otras plataformas, darte a conocer por lo que haces se vuelve posible. Sin embargo, muchos de mis clientes me confiesan sentirse atemorizados solo con pensar que tienen que salir hablando en cámaras y ni se diga con un público físico.
Por eso hoy quiero hablarte de tres aspectos fundamentales que recomiendo tener en cuenta cuando te preparas para hacer un live, una video conferencia o hablar ante un público.
Lo primero que debes analizar es el aspecto somático, esto se refiere a los síntomas físicos producidos por el miedo y/o ansiedad. Los más comunes son: sudoración, enrojecimiento, tensión muscular, manos frías, ritmo cardiaco acelerado, molestias estomacales, respiración rápida y difícil, sequedad de boca. Si te identificas con alguno de estos síntomas, tranquilo. Lo que debes hacer para disminuir la ansiedad y usar el miedo a tu favor es relajarte, y aquí algunos argumentan que es fácil decirlo pero no hacerlo. Pues, es posible con una correcta respiración, la diafragmática, no la que estamos acostumbrados a hacer. También funciona meditar, escuchar música suave, hablar con alguien que te de paz, a otros les funciona escuchar sonidos de las olas del mar. Lo importante es que descubras que es eso que te tranquiliza y ponerlo en práctica.
El segundo aspecto a considerar es el cognitivo, que se refiere a los pensamientos negativos que dejamos que se instalen en nuestra mente, como por ejemplo: «No sirvo para esto», «Voy a hacer el ridículo» «Nunca he podido» «Me da miedo» «Hablo horrible», etc. Si me conoces sabes que constantemente repito: «lo que piensas, sientes; lo que sientes, dices y lo que dices, haces. Así que mucho cuidado con tus pensamientos porque son la clave de tu éxito al momento de exponer. La solución que te propongo es modificar tu pensamiento y para conseguirlo vas a escribir en una columna todos los pensamientos negativos que se te vengan a la cabeza y por cada pensamiento negativo vas a escribir uno en positivo en otra columna. Lo importante es que elimines las palabras negativas. Por ejemplo, si tu pensamiento es: «Hablo horrible» no vas a modificarlo diciendo «no hablo horrible» porque el cerebro no distingue y lo que lo alimenta es NO y HORRIBLE. Una modificación más acertada puede ser «Me preparo para hablar cada vez mejor».
El tercer aspecto es el conductual que se refiere al comportamiento que tenemos como consecuencia de la sensación de miedo. Por ejemplo tartamudear, decir muletillas, bloquearte, jugar con tus botones, lentes, sobarte las manos, mover las piernas, etc. El mejor remedio para superar estas situaciones es prepararte. Ya sea que lo hagas solo o con la ayuda de un profesional, debes entrenar y practicar. Puedes grabarte, puedes verte al espejo, pedirle a alguien que te observe. Recuerda que la práctica hace al maestro y nadie nace sabiendo.
Espero que este artículo te haya sido útil. Recuerda que tu imagen personal no es solo la apariencia, es también tu comportamiento y forma de comunicarte.
8 Comentarios
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Excelente artículo, muy útil para los que nos cuesta hablar en público, además de indicarnos las sintomatologías, nos da ciertos tips y ejemplos de como superar esta dificultad al expresarnos.
EXELNTE ARTICULO
super de gran ayuda
Concreto y preciso, de gran ayuda.
Miss muchas gracias ❣
🤗
Excelente las tres recomendaciones, sé que me ayudarán mucho para mejorar al hablar en público. Saludos Viviana. Muchas gracias🤗
Me alegra que te hayan gustado Alva, un placer.
Excelente las recomendaciones miss, estos tres aspectos nos servirá de mucha ayuda porque son los más precisos al momento de dirigirnos hacia un público.